Vinculado al Camino de Santiago que muchos peregrinos alargan hasta llegar a Fisterra, nació una pequeña ermita de leyenda situada en un marco incomparable junto al mar y que se ha convertido en uno de los mayores atractivos para visitar Muxía.
Es una de las rutas por mar más transitadas y peligrosas de Costa da Morte, donde los vientos azotan con fuerza y las olas rompen bravas contra los acantilados, logrando uno de los paisajes más sublimes de la costa gallega.
Con su forma de península se interna en el Océano Atlántico dando lugar al cabo del mismo nombre, aquel donde los romanos situaron el fin de la tierra con el nombre de Finisterrae, pues no podían creer que hubiera algo más allá de aquel inmenso mar infinito.
En Galicia el mar es un santuario único, que se despliega a los largo de sus 1 200 kilómetros de costa. La belleza de sus rías se fusiona con el magnífico patrimonio cultural, siempre ligado al fascinante mundo marítimo y pesquero.
En Galicia el mar es un santuario único, que se despliega a los largo de sus 1 200 kilómetros de costa. La belleza de sus rías se fusiona con el magnífico patrimonio cultural, siempre ligado al fascinante mundo marítimo y pesquero.
En Galicia el mar es un santuario único, que se despliega a los largo de sus 1 200 kilómetros de costa. La belleza de sus rías se fusiona con el magnífico patrimonio cultural, siempre ligado al fascinante mundo marítimo y pesquero.
En Galicia el mar es un santuario único, que se despliega a los largo de sus 1 200 kilómetros de costa. La belleza de sus rías se fusiona con el magnífico patrimonio cultural, siempre ligado al fascinante mundo marítimo y pesquero.